Las feromonas que desprende el cuerpo, especialmente la vulva y los testículos, se han llevado al laboratorio para crear fragancias que simulan su aroma.
El propósito es estimular y poner “a tono” a la pareja antes de mantener un encuentro amoroso.
El olfato conecta con el cerebro más primitivo del ser humano, y las feromonas que desprenden vulva y testículos “liberan los llamados terpenos y fenoles, que tienen un impacto en la respuesta sexual”, explica Silvina Valente, miembro del comité de jóvenes de la Federación Latinoamericana de Sociedades de Sexología.
Hoy en día muchos perfumes contienen esa sustancia que hace que vuelvan la vista atrás al pasar. Perfumes y fragancias que intentan imitar el olor vaginal, como el caso de Vulva Original, de la compañía alemana Vivaeros. Según sus creadores, “desencadena el deseo y la atracción”.
La fragancia no es sólo apta para ellos. Las mujeres también se aplican esta sustancia para incrementar la experiencia olfativa durante el sexo.
Y es que las feromonas tienen como fin inducir un cambio de comportamiento en el otro, mejorar la atracción y aumentar predisposición a iniciar una relación sexual, añade Valente.
Ahora bien, ¿es posible obtener este aroma? Óscar Rodríquez Figueiras, investigador de la Universidad de Oporto (Portugal), confirma que sí. “Se puede imitar casi cualquier olor que queramos, por la síntesis química o mezclando ingredientes de fragancias diferentes para obtener el aroma deseado”.
Vía: vanguardia.com.mx
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